Aceites con acción astringente, antiséptica, antipruriginosa y analgésica.
El aceite esencial de limón es originario de Asia Central, al norte del Himalaya, y se obtiene del limonero. Es uno de los aceites más ricos en vitaminas, ya que cuenta con vitamina C y A. Aporta una acción antioxidante y ayuda a preservar la piel ante procesos oxidativos.
El aceite esencial de menta cuenta con activos como el mentol o el menteno, tiene propiedades antiinflamatorias, antibacterianas y regeneradoras.